Este era el panorma que nos aportaba una mesa con sus 4 sillas de exterior que, lo único bueno era su precio y aunque teníamos claro que era para hacer el papel, solo duraron 2 años con lo qué... al final salió caro.
Entonces ante la necesidad de comprar otra mesa y el mal sabor de boca de tirar algo "nuevo" una luz se iluminó en mi interior y la inspiración fluyó para aprovechar la estructura metálica de sillas y mesa y sustituir el aglomerado forrado podrido, por madera tropical de calidad decente (bankirai) y darle un giro de 360º a las sensaciones que transmitía el conjunto.
Las sillas decoradas con el estilo Garbatti
La mesa la amplié en tamaño y ahora tenemos espacio de sobra. Antes todo estaba justo y daba sensación de agobio.
Tengo que decir que se está muy agusto sentado. Ala, os invito a una cervecita!!